El año 2018 fue el «año de la revelación» de los abusos sexuales cometidos por miembros del clero de la iglesia católica. En algunos reportes se ha llegado a contabilidad hasta tres mil menores de 13 años —en su mayoría hombres— que fueron abusados.
En este mismo año en varios países se llevó a cabo protestas para evitar que personas del mismo sexo contraigan matrimonio. En su mayoría —de acuerdo con lo que se puede leer en las noticias— son personas que pertenecen a un grupo religioso. Por la ubicación geográfica en la que vivo en su mayoría son cristianos.
Parece curioso ver que en las publicaciones de las redes sociales —al menos en quienes he sido testigo— apoyan las iniciativas para estar en contra de las leyes que les den sus derechos a la comunidad LGTB, pero las noticias de abusos a niños —que a mi parecer esas sí son desagradables— ni las comparten.
«La biblia está en contra de los matrimonios del mismo sexo», profesan en las redes sociales aduciendo las razones por las que dios está en contra, y por ello se debe evitar que una ley que los «favorezca» se apruebe.
¿Qué debería pasar entonces contra los sacerdotes y pastores que abusan de niños? Si el abusador fuera una persona secular, seguro las publicaciones serían a montón, pero son sacerdotes. Quizá tengan miedo de estar en contra de los «siervos de dios».
Esa dicotomía moral, a la que le llamo «Entre la moral y el ocultamiento» pareciera que no me importa que un niño haya sido violado por un sacerdote, alguien en quien confiaron porque su fe les dictamina que son enviados por dios, pero sí me importa el matrimonio del mismo sexo porque a dios le ofende. ¿Es en serio?
¿Son morales en el matrimonio del mismo sexo, pero en los abusos a niños lo ocultan? Aquí hay algo que no coincide. Pareciera una doble moral.
A mi juicio es más importante que se investigue los casos de niños abusados por la iglesia a estar ocupando el tiempo en adultos que saben lo que hacen y que no le están ocasionando daño a nadie.
Esperen... sí le están ocasionando daño a alguien: al ego de una persona que se dice de fe.
Comentarios
Publicar un comentario