La conciencia y el retorno a la iglesia


 

Durante los últimos 10 años de mi vida me había abstenido de ir a la iglesia. Como lo he expresado en otras entradas, acepté que había dejado de creer. Y no he cambiado de opinión.


¿Qué es lo que ha cambiado? Pues bien, ahora que soy padre en funciones una de mis pequeñas me dijo que quería ir a la iglesia, en especial a un grupo de personas de su misma edad.


Soy de la opinión que las creencias o no creencias deben ser una decisión personal. Forzar a una persona a «no creer» es lo mismo que forzar a alguien a creer. Le expresé que la llevaría a un grupo de una iglesia donde hacen actividades para jóvenes de su edad.


Lo interesante viene aquí. ¿Qué pasa por mi mente? ¿A caso he cambiado de forma de pensar otra vez? Las respuestas a continuación. Por mi mente sencillamente no pasa nada. Cuando iba a menudo como «creyente» lo que me gustaba era la comunidad, pero por dentro no creía en la mayoría de las cosas que decían. Eso generó en mí esa «disociación cognitiva» entre querer forzar una creencia que no era vigente en mi vida.


Tampoco puedo decir que ha cambiado mi forma de pensar. Entrar a un servicio provoca un sentimiento de hipocresía. De saber que estoy en un lugar cuando realmente no quiero estar. La solución para ello es quedarme en la cafetería.


Según lo veo yo, y cada quién tendrá su forma de ver las cosas, siempre respetaré las creencias de otros, siempre y cuando estas no afecten la moral, la calidad de vida o hagan algún daño físico a otros. 


En palabras de Voltaire: «No estoy de acuerdo con lo que dices, pero con mi vida defenderé tu derecho a decirlo».


«No estoy de acuerdo con lo que dices, pero con mi vida defenderé tu derecho a decirlo» -Voltaire


Algo que me gusta es cuando hablo con mi pequeña al terminar un servicio. Entablamos una conversación sobre lo que le enseñaron y yo le hago preguntas para hacerla pensar.


Al final la decisión de ser creyente o no es de ella. Mi labor es apoyarla a que sea una mujer profesional e integra, independiente de sus creencias.

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